Los agentes arrojaron bombas lacrimógenas a unos 100 comunicadores que marchaban hacia el palacio presidencial. Protestaban por el asesinato de 17 colegas en los últimos años
Crédito foto: EFE
"¡Cero muertes, cero impunidad!" era la consigna que gritaba la columna de periodistas que intentaba llegar a la sede del Gobierno mientras las fuerzas de seguridad la empujaba y le arrojaba gases lacrimógenos.
Tras conocer los disturbios entre los manifestantes y los militares, el secretario de Comunicaciones de la Presidencia, Miguel Angel Bonilla, aseguró que "el presidente Porfirio Lobo no dio ninguna orden de ningún tipo de represión".
Unos cien oficiales de la Guardia de Honor Presidencial cargaron contra los miembros -la mayoría de ellos, mujeres- de una agrupación denominada "Periodistas por la Vida y la Libertad de Expresión".
Durante la movilización, los comunicadores levantaron un ataúd como símbolo del asesinato de sus 17 colegas desde 2010. La mayoría de esos casos permanecen impunes. El último fue perpetrado el 6 de diciembre cuando dos sicarios dispararon desde una motocicleta contra Luz Paz.
"Exigimos una investigación exhaustiva de los crímenes, queremos que de una vez por todas se conozcan quiénes son los que están matando a los periodistas”, dijo una de las manifestantes.
Otro comunicador aseguró: "No permitamos que el silencio abone el terreno de quienes nos están exterminando por hacer ese periodismo decente y justo que requiere nuestro país. Demandemos un alto a la criminalidad y, sobre todo, a la impunidad".
Honduras atraviesa una ola de violencia en la que, según investigaciones, hasta policías son parte del crimen organizado. El país tiene, además, la tasa más alta de homicidios en el continente, con 82 por cada 100 mil habitantes.
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