Ejemplo de lucha contra el VIH en Honduras
Su entrega a favor de los pacientes lo ha llevado a ser nominado para el premio Front Line
HONDURAS
Aún era un jovencito cuando conoció el dolor que padecen las personas que viven con el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Fue a finales del año 1985, tiempo en el que la enfermedad se reproducía en el país y la información sobre este mal era escasa, cuando llegó José Zambrano a una de las sesiones de la Liga contra el Sida, organización que también daba sus primeros pininos.
Emilio Pineda Soto (QDDG), uno de sus mejores amigos, se encargó de llevarlo a la reunión sin imaginar que desde aquel momento él ayudaría a las personas que viven con la enfermedad y se convertiría en su bandera.
Han pasado ya 26 años, pero los recuerdos sobre el impacto que representó para José aprender sobre el VIH y conocer miles de historias de discriminación y sufrimiento aún están presentes.
"Fue difícil para mí encontrarme con una realidad que desconocía, pues habían hasta algunos términos que no comprendía, pero me ayudó a buscar respuestas y anhelar un mejor futuro para las personas que estaban siendo víctimas de la enfermedad", dijo José al recordar sus inicios en el tema del VIH.
Su labor comenzó como promotor y facilitador de información en la zona del barrio Belén, en Comayagüela.
De forma posterior, gracias al involucramiento que logró en diferentes actividades su papel protagónico, se convirtió en el coordinador de una de las asociaciones en favor de promover la prevención en grupos homosexuales.
En 1996 José fundó el grupo de autoapoyo de personas viviendo con VIH conocido como Renacer.
En 2004 surge otro proyecto a iniciativa del entrevistado luego de involucrarse en el proyecto de la Casa Renacer, centro que funciona en el barrio El Bosque.
Este centro de ayuda brinda albergue, alimentación y medicinas a personas infectadas y afectadas por la enfermedad en caso de requerir de un techo temporal.
Reconocimiento
Gracias a su labor de voluntariado José ha sido nominado recientemente para el premio Front Line.
Este galardón lo otorga la fundación conocida como Front Line, una institución internacional para la protección de defensores de los derechos humanos.
La organización fue fundada en Dublín en el año 2001.
Este premio se instituyó en 2004 y cada año se eligen seis finalistas para el mismo de entre unos cien candidatos a nivel mundial, y este año José es uno de los aspirantes al galardón.
Los candidatos al premio serán evaluados por un jurado irlandés antes de dar a conocer al ganador. El personaje que logre el premio será invitado este año a Dublín para participar en una ceremonia especial. La fecha del viaje ha sido programada para el 5 de mayo, cita en la que el acreedor del premio será recibido por Mary Robinson, ex alta comisionada de la Organización de las Naciones Unidas, entre otras personalidades.
El premio consiste en 15,000 euros, de los cuales 5,000 deben ser para el homenajeado y el resto para la institución que representa. El año anterior Soraya Rahim, de Afganistán, recibió este galardón.
Emilio Pineda Soto (QDDG), uno de sus mejores amigos, se encargó de llevarlo a la reunión sin imaginar que desde aquel momento él ayudaría a las personas que viven con la enfermedad y se convertiría en su bandera.
Han pasado ya 26 años, pero los recuerdos sobre el impacto que representó para José aprender sobre el VIH y conocer miles de historias de discriminación y sufrimiento aún están presentes.
"Fue difícil para mí encontrarme con una realidad que desconocía, pues habían hasta algunos términos que no comprendía, pero me ayudó a buscar respuestas y anhelar un mejor futuro para las personas que estaban siendo víctimas de la enfermedad", dijo José al recordar sus inicios en el tema del VIH.
Su labor comenzó como promotor y facilitador de información en la zona del barrio Belén, en Comayagüela.
De forma posterior, gracias al involucramiento que logró en diferentes actividades su papel protagónico, se convirtió en el coordinador de una de las asociaciones en favor de promover la prevención en grupos homosexuales.
En 1996 José fundó el grupo de autoapoyo de personas viviendo con VIH conocido como Renacer.
En 2004 surge otro proyecto a iniciativa del entrevistado luego de involucrarse en el proyecto de la Casa Renacer, centro que funciona en el barrio El Bosque.
Este centro de ayuda brinda albergue, alimentación y medicinas a personas infectadas y afectadas por la enfermedad en caso de requerir de un techo temporal.
Reconocimiento
Gracias a su labor de voluntariado José ha sido nominado recientemente para el premio Front Line.
Este galardón lo otorga la fundación conocida como Front Line, una institución internacional para la protección de defensores de los derechos humanos.
La organización fue fundada en Dublín en el año 2001.
Este premio se instituyó en 2004 y cada año se eligen seis finalistas para el mismo de entre unos cien candidatos a nivel mundial, y este año José es uno de los aspirantes al galardón.
Los candidatos al premio serán evaluados por un jurado irlandés antes de dar a conocer al ganador. El personaje que logre el premio será invitado este año a Dublín para participar en una ceremonia especial. La fecha del viaje ha sido programada para el 5 de mayo, cita en la que el acreedor del premio será recibido por Mary Robinson, ex alta comisionada de la Organización de las Naciones Unidas, entre otras personalidades.
El premio consiste en 15,000 euros, de los cuales 5,000 deben ser para el homenajeado y el resto para la institución que representa. El año anterior Soraya Rahim, de Afganistán, recibió este galardón.
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